El fin de semana del 25 y 26 de enero se celebró la Exposición Internacional de Lugo produciéndose en un cierto momento un conflicto en relación a aquellos perros definidos como Perros Potencialmente Peligrosos.
Según las noticias recibidas en esta sede, un responsable de la estructura de la Junta de Galicia solicitó que los perros de las razas de referencia estuvieran en el recinto y fueran juzgados en el ring con bozal.
Esta situación hacía absolutamente imposible el objetivo fundamental de la exposición que era la valoración de los ejemplares.
Asimismo, la RSCE considera que lo relatado anteriormente no está en coherencia con lo dispuesto en el artículo 11 de la Ley 50/1999, en la que se exceptúa al conjunto de estas razas cuando los animales están sometidos a pruebas para la selección y mejora de la especie.
Conviene señalar que la exigencia del uso del bozal impide determinar la morfología, el comportamiento y temperamento que son inherentes a la raza.
También conviene señalar que tampoco se ajusta el incidente ocurrido en Lugo con lo dispuesto en el punto 2 del artículo 8 del RD 287/2002 que desarrolla la Ley 50/1999 que afecta a las medidas de seguridad.
