Desde la Real Sociedad Canina de España , despedimos con enorme tristeza a Lobo, un valiente pastor belga malinois de tan solo cuatro años, que ayer perdió la vida en un trágico accidente mientras cumplía con su labor.
Lobo formaba parte de la Unidad Canina de la Policía Municipal de Madrid desde que era prácticamente un cachorro.
Especialista en detección de explosivos, participaba en los operativos más delicados del Palacio de Cibeles, trabajando siempre con precisión, serenidad y una entrega ejemplar.
No buscaba medallas. Su única misión era proteger. Vivía con su guía, compañero inseparable, con quien compartía un vínculo profundo y lleno de confianza.
Su dedicación y temple son el reflejo de una crianza responsable desde sus primeros días. Lobo es el ejemplo del valioso papel que desempeñan estas razas en tareas de alta exigencia, y la importancia del trabajo comprometido de quienes crían a estos perros con respeto y vocación.
Queremos agradecer su vida dedicada al servicio y extendemos este homenaje a todos los perros como él, que cada día arriesgan todo por nuestra seguridad.
Por tu entrega y tu dedicación.
Gracias, Lobo. Descansa en paz.